martes, 19 de octubre de 2010

Recordando Un Suceso Histórico


El domingo 17 de Octubre del año 2010 se cumplió un sueño de miles de fanáticos de la mejor banda del mundo. Junto con otros 44999 seguidores de todas las edades (según estimaciones de la masa que enloqueció anoche en el estadio nacional), tuve el placer y privilegio de ver en un escenario a la Santísima Trinidad del rock descargando una pequeña, pero tan fuerte y poderosa, parte del repertorio que durante los últimos 36 años encumbró a Peart, Lifeson y Lee a alturas olímpicas, reclamando su justo lugar de dioses musicales. Y aunque un show de cerca de 3 horas, con un total de 24 canciones más un solo demoledor de batería, difícilmente pueda ser catalogado de corto, me atrevo a decir que sólo fue una pequeña muestra para un conjunto que tiene a cuestas la tremenda suma de 19 discos y otro en camino. Y es que Rush podría mandarse 3 o 4 conciertos, escogiendo temas distintos en cada presentación, y cada uno de ellos sería una experiencia única, fantástica, genial y casi religiosa.

Todo comenzó cuando a las 21:00 las luces del coliseo se apagaron para dar paso a un video que buscaba retratar los inicios de la banda, allá por el año 1974 cuando Neil Peart se une a Lee y Lifeson para mantener la formación estable hasta el día de hoy. El remodelado estadio casi se fue abajo cuando la guitarra de Alex, luciendo un emotivo número 33 en el cuerpo, dio la partida para The Spirit of Radio, abriendo los fuegos de una noche inolvidable. Los saltos, cantos y alaridos por montones no cesaron cuando tocó el turno de la más calma Time Stand Still, seguida de Presto, y la emoción brotó a raudales para la interpretación de Stick It Out, dedicada a los mineros rescatados. Workin' Them Angels, Leave That Thing Alone y Faithless mostraron al grupo en toda su perfección, dando paso luego a uno de los dos temas del nuevo disco (Clockwork Angels) que presentaron: BU2B. Una espectacular Freewill hizo cantar a todo el extasiado público, y los no menos clásicos Marathon y Subdivisions dieron el cierre a la primera parte del show, pues los veteranos intérpretes, en palabras de Geddy, debían descansar unos 20 minutos.



Sólo por mostrar lo que significa Rush y cómo es capaz de llegar a todas las generaciones, les cuento que en el intermedio me atacó la sed y fui a comprar una bebida. En la pseudo fila para comprar tenía a mi lado a un tipo con su señora y su hijo, que no debe haber tenido más de 10 años. No es que sea sapo, pero no pude evitar esucharlos conversar sobre sus temas predilectos, y cómo el hijo le preguntaba a su padre si iban a tocar La Villa Strangiato, porque era su favorita. Ante eso no hay mucho más que decir que: ¡qué tremendo es Rush!

No hacía un minuto que me había terminado la coca cola y el cigarro de rigor, cuando otro video da la entrada para la segunda parte del concierto. Y fue como si un volcán hubiese estallado cuando los tres genios reaparecen en escena, atacándonos con la genialidad y pedazo de canción que es Tom Sawyer. Y tal como decían los rumores, no se quedaron sólo con el viejo Tom, sino que regresaron en su maquinita del tiempo directo hasta 1981 para desempolvar el Moving Pictures entero. Dudo que se pueda decir mucho al respecto, pero escuchar Tom Saywer, Red Barchetta (los videos y la música hacían sentir el viaje en el antiguo Barchetta rojo una realidad), YYZ (perdonen el francés, pero conchasumadre que es bueno este tema del carajo), Limelight (otra que dejó a los 45 mil presentes alucinando), The Camera Eye, Witch Hunt, y Vital Signs, es una huea realmente invaluable. A estos casi 40 minutos de mi vida que quedarán para siempre atesorados como uno de los períodos más notables que haya experimentado, siguió otro de los temas nuevos, esta vez un tema potente y rockero llamado Caravan. Para seguir con el delirio, Peart se tomó el escenario durante unos 8 minutos, en los que mostró el inigualable talento que posee frente a una batería. Acto seguido, Closer To The Heart volvió dementes a las mujeres que asistieron al evento, para luego estallar en una locura general y sin igual para las 2 primeras partes de 2112: Obertura y The Temples of Syrinx. Creo que tratar de comentar lo que significa escuchar a 45 mil personas corear "weeeeee are the priests of the temples of syrinx" carece de todo sentido. Far Cry amagó con darle fin al espectáculo, pero la Santísima Trinidad tenía un par de sorpresas. Para el deleite de padre e hijo compañeros de fila, tras unos breves segundos fuera del escenario, los genios canadienses volvieron con una mágica interpretación de La Villa Strangiato, para cerrar una de las mejores noches de mi vida con la excelente Working Man.



¿Que más puedo escribir? Sí, extrañé temazos como Roll the Bones y The Twilight Zone, entre tantos otros, pero algo me dice que después de 36 años esperando, esta es sólo la primera vez que Rush nos visita, y que tendré la oportunidad de oírlos en una próxima ocasión. Ojalá los dioses escuchen mis ruegos.

Zuru

PS: Plasme su experiencia en los comentarios, y reviva el concierto en la lista con todos los temas que encontrará al costado del blog.

7 comentarios:

  1. Indescriptible. Guardaré en la memoria esta experiencia por el resto de mi vida.

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  2. Lo mismo digo. Aunque no pude ver mucho debido a que habian puros monos gigantes frente mio, ha sido yo creo uno de los mejores (si es que no el mejor) concierto de mi vida.
    Me quedaron faltando algunas canciones como Roll the bones, Distant early warning, Fly by night y The body electric entre tantas mas, pero no por eso fue menos el concierto.
    Infartante!

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  3. jaja olvide comentar, que habia una bandera notable, que decia 21+12 = 33.
    Me falto tambien The enemy within, una de mis canciones preferidas.
    Lejos la cancion que mas gozé fue Leave that thing alone, porque poca gente que estaba alrededor mio la conocia, por lo que pude escucharla perfectamente. Es una genialidad.

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  4. Sólo me faltó Flyby Night... las otras que faltaron eran prescindibles...

    y cómo es eso de que las mujeres alucinaron con Closer to the Heart??? Me indigné. Estuvo NOTABLE esa interpretación, sobre todo con el inicio de Lifeson con su guitarra de 12 cuerdas... fue uno de los mejores momentos de la noche (ni cagando el mejor, pero estuvo muy bueno!)

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  5. Jajaja, lo que pasa es que para ese tema tenía un par de minas al lado que estaban trastornadas, haciendo movimientos espásmicos. Pero en ningún caso quise decir que el tema no haya sido disfrutado por todos.

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  6. Poco que añadir a este increible recuerdo y experiencia que nos dio Rush!
    De los conciertos a los que he asistido, nunca habia visto tal nivel de produccion: escenografia, ambiente, videos (intro, durante y de termino), luces y humo de colores, estructuras de acero con forma de una araña gigante moviendose permanentemente, fuego, imagenes psicodelicas de fondo y una performance impecable con un sonido espectacular, nitido y lleno de fuerza, potenciado por repertorio notable!!!
    me falto fly by night, the enemy within y Driven que la encuentro simplemente LA RAJA.
    Un aplauso infinito para estos grandes del rock, gracias Rush! y esperemos que se repita!

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  7. Si no fuese por un tio que se estava quedando sin aire cerca de donde estava, y gracias a algunos chiquillos que ayudaron para pasarlo por la reja de cancha, nunca hubiese llegado a donde alcanze a estar.
    Practicamente empujando, saltando y avanzo centimetro a centimetro hasta llegar a la segunda corrida de monos detras la reja para ver el concierto un poco mas comodo (olores agradables, empujones locos y gente mas alta que uno), se podia apreciar magno show que se pegaron Rush...valio la pena un poco de movilidad entre el publico...

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