Bajo la escalera a saltos. El sonido inconfundible que acompaña el destello sobre las puertas me indica que quedan sólo segundos. Alcanzo a entrar antes que cierren las puertas, y con ellas, mi destino.
Voy atrasado. El reloj marca las 11:37 y me esperan a las 12:15. No hay forma alguna de que llegue a tiempo. Ya han pasado tres estaciones y cinco minutos, mas ningún argumento para excusarme asoma por mi mente.
Las puertas están a un tris de cerrar cuando me golpea: “Ya lo sé, basta con que les diga que...”. No logro completar la idea cuando una aparición me estremece. Su piel es suave y morena. Sus manos, una danza sublime. Sus negros cabellos llegan justo a la perfección de su curvatura. Su cara es el llanto de los ángeles. Sus ojos contienen la vida.
Sigo embobado cuando llegamos a la cuarta estación. Se abren las puertas y, tras unos segundos de duda, la veo salir rauda. Nuevamente el pitido de costumbre y no vacilo en correr a su encuentro. Desde el andén alcanzo a divisar su figura volando escalera arriba.
Tras el acoso subterráneo, salgo a la luz del día. Allí está, en la esquina, presta a cruzar. Me muevo a los tumbos entre los peatones hasta alcanzar la esquina y me lanzo a la calle. No doy más de cuatro o cinco pasos cuando un bocinazo tremendo y un alarido temeroso me indican que algo anda mal. Entonces siento el golpe brutal de la inmediatez.
Un guardia me despierta diciéndome que hemos llegado a la estación terminal. Me pregunta si me encuentro bien y me ofrece un pañuelo. Un hilo de sangre brota de mi frente. Me limpio, le agradezco, y tomo el tren de vuelta. Son las 12:07, el tiempo ha acabado. Las puertas del último vagón se cierran y el tren empieza su marcha cansina.
Cinco minutos y tres estaciones después, consulto el reloj. Marca las 11:37. Miro la puerta y la veo entrar. Comprendo que nunca llegaré.
puta voy a tener q dejar de acosar mujeres en el metro parece
ResponderEliminarjajajaja
Te felicito, de todo corazon.
ResponderEliminarLa cagaste.... muy buena! al menos estoy tranquilo que aún no me bajo para seguir a una mina, jajajaja
ResponderEliminarZuru, felicidades por el blog, esta buenisimo.
ResponderEliminarEs bueno encontrar cosas tan variadas y bien escritas dentro de un espacio tan reducido.
Un abrazo
Cheche